Bleeding Roots, cuidar el jardín nunca fue tan perturbador
Una experiencia corta y gratuita que salió el 7 de septiembre en Steam.
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Yo tengo una flor, la tengo que cuidar…
Es primavera, las flores de nuestro jardín están en su mejor momento. Sin embargo, nuestra vida no está en consonancia. Nuestra esposa nos abandonó y encontramos en la jardinería un modo de escape de la realidad.
Así arranca Bleeding Roots, un juego gratuito desarrollado por MechaniKoi, un estudio argentino que se presenta con este título.
“Soy Luka Rizzi y desarrollo juegos desde los doce años, que aprendí con tutoriales de Game Maker en inglés y traductor de google jaja.
Hasta los 20 todos mis proyectos los hacía solo y los promocionaba poco, a los 20 me metí a estudiar Diseño de Juegos en la facultad y me enteré que existía una industria re copada.
En esa facu conocí a muchos compañeros que recién empezaban sin saber de gamedev pero eran muy capaces y con ganas de aprender. Así que ahora, cuatro años más tarde, hicimos un estudio de amigos para probar hacer juegos juntos. En Bleeding hubo bastante gente que aportó un pedacito, ya sea un modelo 3D o una pieza de arte, porque estaban disponibles y se copaban. Todos obviamente están en los títulos y siempre que pueda darles cumplidos lo voy a hacer porque absolutamente todos laburaron re bien. Pero destaco particularmente a Juan Jousset "Totally", que es el otro pie grande del proyecto junto a mi, y sin él el proyecto nunca se habría terminado.” — Nos cuenta uno de sus integrantes.
El título dura unos 15 minutos, dependiendo de la velocidad con la que leamos y de las ganas de interactuar con todo lo que nos rodea.
El gameplay como el estilo artístico es de Play 1, por lo cual nos encontraremos con los típicos controles tanque de juego como Resident Evil o Silent Hill. Pero no hay momentos en los que tengamos que huir, por lo cual este tipo de movimiento no será un problema.
La historia se nos va contando a través de las plantas que vamos regando en las 4 estaciones. Y cada nivel ocurre en una estación diferente, siendo esto también una forma de ver la decadencia de nuestra vida y del patio de nuestra casa.
No hay jumpscares ni enemigos latentes pero a medida que avanzamos vamos sintiendo como una incomodidad va in crescendo. Hacia el final llegará ese punto en el cual no queremos avanzar porque nos vamos dando cuenta de lo que suspenderá.
En definitiva, recomiendo fuertemente probar está experiencia principalmente por qué es gratis, es corta y, por supuesto, es una joya nacional.